La muerte de Nadia Cachés es un misterio sin dilucidar
Se cumplieron cincuenta y tres meses de la muerte de Nadia Cachés y el caso sigue sumido en el misterio. No está archivado porque se trata de un hecho impune pero aún los investigadores se encuentran en un punto cero.
Ya se explotaron la mayor parte de las pistas y no arrojaron resultados positivos.
Hoy, la ciencia avanzó de una manera incontenible a todo nivel y se volvió auxiliar indispensable para el investigador policial. Muchos delitos terminaron aclarándose por cotejo de ADN, pericia utilizada a nivel mundial por diferentes agencias de seguridad.
Sin embargo a pesar de todos los elementos que se pusieron en juego, el crimen de Nadia permanece impune.
Algunas personas señalaron que las autoridades partieron de una base errónea sin advertir detalles que a la larga le pasaron factura a los pesquisantes y terminaron provocando que hoy este homicidio continúe sin aclararse.
Los familiares y allegados a Nadia exigen Justicia pero la fuerza con la cual se inició la investigación parece diluirse a medida que las pistas no conducen al esclarecimiento de lo sucedido. Sin embargo las manifestaciones públicas, en especial el grupo “Buscando a Nadia” en Facebook mantiene latente la esperanza que se llegue a identificar al responsable de su muerte.
Aquel lunes 13 de diciembre del año 2010 la joven de 20 años y que vivía en Canelones fue en bicicleta a Santa Lucía a encontrarse con su prima con quien pasó la tarde. Sobre la hora 17:30 decidió retornar a su casa a la que nunca llegó. Se realizó la denuncia de desaparición y la Policía se movilizó.
Se rastreó una amplia zona en su busca, se recreó el posible recorrido que realizó a la salida de la vivienda de su familiar y se investigó su entorno. Nada se consiguió y la desesperación comenzó a ganar a la gente.
Finalmente la peor hipótesis se convirtió en realidad el 23 de abril del año 2012 cuando en Estación Margat –localidad entre Santa Lucía y Canelones- en las inmediaciones del arroyo que llevaba el mismo nombre fueron hallados restos humanos. Fueron sometidos a la prueba de ADN y dos días después la Policía Científica confirmó que se trataba de la joven. A partir de allí el expediente fue caratulado como homicidio.
Se interrogaron a numerosas personas y muchos opinaban que su padre ocultaba información. Fue indagado en distintas oportunidades pero nada se le probó y el hombre fue amenazado por lo que contrató en su momento a un abogado ya que manifestó ser injuriado y acusado falsamente.
Lo concreto es que el tiempo transcurrió y hoy el hecho continúa impune. No está claro aún si los restos fueron trasladados de otro lado y plantados en el lugar o si por lo espeso del follaje quienes buscaron en esa zona no encontraron el cuerpo. Así está el tema de la investigación. El misterio continúa.
